La finalidad del velatorio del difunto es acompañar y reconfortar a los más allegados del difunto. Es un espacio de tiempo en el que se despide al difunto, y es un momento importante en el proceso de duelo.
El velatorio, en Argentina, suelen durar entre 6 a 24 horas y se puede dar en el las salas velatorias especialmente habilitadas de las empresas fúnebres, o en el domicilio particular (algo inusual en los tiempos que corren). Las empresas de servicios fúnebres son lo recomendable, puesto que se encargan de todo: trámites, atenciones personalizadas, horarios, comodidad, higiene, etc. Acudir al velatorio es importante para los deudos.
Sólo la presencia ya es un gesto muy honrado y valorado. Allí se acostumbra a dar el pésame y a acompañar a la familia inmediata del difunto. Su visita debe de servir para reconfortar a la familia y acompañarla, por ello si no llega otra visita que le tome el relevo no debe de irse.